¿Puede conducir mi paciente?

La pregunta que nos hace el paciente que sufre una enfermedad cardiovascular es frecuente y difícil de resolver. De la respuesta pueden depender la libertad del paciente y la seguridad de todos. Como no siempre coinciden, comités de expertos de la Unión Europea han evaluado los riesgos que pueden suponer las enfermedades cardiocirculatorias para la conducción. Sus conclusiones se plasman en el Reglamento General de Conductores. Es una norma de obligado cumplimiento para médicos y pacientes. Esta web es una ayuda para la tarea del médico, muchas veces compleja.

Calcular aptitud de conducción

Destinatarios

Los destinatarios de esta ayuda son los médicos que pueden participar en el consejo o la toma de decisiones relativos a la posibilidad de que un paciente pueda conducir: médicos de familia, médicos evaluadores de centros de reconocimiento de conductores, cardiólogos, internistas… No se aconseja su uso fuera de ese contexto, por su complejidad y diseño.